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El sindicato alertó sobre la pérdida del poder adquisitivo y la suba de la desocupación
Este miércoles, la Junta Interna de ATE INDEC presentó una nueva actualización de su ejercicio mensual sobre cuál debería ser el ingreso necesario para cubrir las necesidades mínimas de una familia tipo.
Según el informe, en mayo de 2025 se necesitaron $1.840.098 para sostener un hogar compuesto por dos personas adultas y dos menores en edad escolar.
Fuerte pérdida del poder adquisitivo
Raúl Llaneza, Secretario General de ATE INDEC, explicó:
“Desde que asumió el gobierno de La Libertad Avanza hemos perdido un 26 % de nuestro poder de compra. En la última negociación paritaria, el Gobierno ni siquiera presentó una propuesta para compensar esa pérdida”, denunció.
De acuerdo al informe, la inflación acumulada desde diciembre de 2023 es de 209,5 %, mientras que la pérdida del poder adquisitivo asciende a 25,5 %, tomando como referencia el salario testigo del Nivel D, Grado 0.
Desocupación en niveles de pandemia
El sindicato también expresó su preocupación por el último dato oficial de desocupación, publicado por el INDEC, que alcanzó el 7,9 % en el primer trimestre de 2025.
Este índice retrotrae el mercado laboral a niveles similares a los del tercer trimestre de 2022, cuando aún se sentían los efectos de la pandemia de COVID-19 sobre la economía.
Reclamos urgentes: aumento, bono y paritaria libre
Ante este panorama, ATE INDEC reiteró una serie de demandas concretas para recomponer el poder adquisitivo de las y los trabajadores estatales:
- Aumento de emergencia del 113 %, en una sola cuota, para todo el personal de la Administración Pública Nacional, sin distinción de modalidad contractual.
- Reapertura de la paritaria, libre y sin techo, que permita recuperar el salario perdido entre diciembre de 2015 y mayo de 2025.
- Bono mensual de $150.000 para todos los niveles de contratación en el Estado.
Desde la Junta Interna insisten en que los salarios deben reflejar el costo real de vida y no seguir atados a índices que no cubren las necesidades básicas.
“La emergencia es ahora. Las y los trabajadores estatales no pueden seguir esperando”, concluyeron.
