En la tarde de ayer, jubilados y jubiladas, acompañados por un amplio conjunto de organizaciones sociales y políticas y por los diputados nacionales Víctor de Gennaro, Graciela Iturraspe, Liliana Parada y María América González, llevaron adelante la marcha 1050 en reclamo de condiciones dignas de jubilación.
“El cielo llora, pero de alegría, son todos los compañeros que nos mandan la energía para seguir luchando desde el año ‘97 para decirles a estos ladrones que nosotros los jubilados logramos que se derogaran las AFJP”, comenzó su intervención la diputada María América González en la marcha 1050 de los jubilados frente al Congreso.
Ni la lluvia ininterrumpida, ni la niebla y mucho menos el frío amedrentaron a los trabajadores jubilados y en actividad que se concentraron en la tarde de ayer frente al Congreso de la Nación.
González, histórica luchadora por los derechos de los jubilados, retomó: “logramos la derogación de las AFJP pero que fueran para los trabajadores jubilados no para que el 99% vaya para los títulos públicos, por eso el camino que ustedes han marcado lo vamos a seguir hasta las últimas consecuencias. Por la fuerza de los que no se resignan, jubilados y pensionados de la república argentina presentes”.
El diputado Víctor de Gennaro, uno de los fundadores de la CTA y de la Constituyente Social dijo, a su turno: “Yo simplemente quiero ratificar que hemos sido paridos por estas marchas de los jubilados, ahí está el cura Luis (Sánchez) que siempre nos alentó a Dios rogando y con el mazo dando. En nuestro país sobra plata, lo que falta es la vergüenza de los funcionarios por lo tanto la continuidad de esta lucha está asegurada. Lo que tenemos que asegurar nosotros es que realmente nuestros viejos hoy logren vivir dignamente por eso estamos acá para agradecerles que sean los que han logrado encarar la lucha de la resistencia digna”.
Antes de darle la palabra a Graciela Iturraspe, Marcos Wollman, de la Mesa Coordinadora de Jubilados, leyó una carta que mandó desde México el secretario general de la CTA: “Compañeros y compañeras, por medio de la presente quiero decirles que lamentablemente y debido a que me encuentro fuera del país cumpliendo la agenda de la CTA esta vez no podré asistir al abrazo de los miércoles de los jubilados pero no quería dejar de enviarles mi adhesión como secretario de la CTA Nacional a esta lucha que está cumpliendo el abrazo número 1050 y saludo a todos los compañeros y compañeras que no se rinden y movilizan con la convicción de siempre, un fuerte abrazo, Pablo Micheli”.
“La verdad que este día de la marcha 1050 es de nuevo un día de fiesta para nosotros, en este día lluvioso, frío, gris, es impresionante la cantidad de compañeros y compañeras que le han puesto el pecho a esta pelea. En este proyecto, que tengo el privilegio de representar en esta Cámara, proponemos el 82% por cargo y función, es decir, que el haber jubilatorio vuelva a tener un carácter sustitutivo del salario, nos seguimos reivindicando como parte de la clase, somos trabajadores jubilados y como tales queremos vivir el mismo nivel de vida que teníamos cuando estábamos en actividad, de ahí el tema del 82%”, explicó Graciela Iturraspe, diputada nacional y secretaria de la Comisión de Previsión Social de la Cámara.
La diputada nacional por Buenos Aires añadió que el proyecto de Ley de Previsión plantea que como “trabajadores y trabajadoras que han trabajado toda la vida pero que no tuvieron la suerte de haber estado en blanco y llegar a aportar los 30 años entonces planteamos una asignación a la vejez”. El proyecto legislativo delinea que el haber mínimo debe ser equivalente al salario mínimo, vital y móvil. “Pero lo más importante es que lo que tenemos que reconstruir es la conducción de ese instituto de previsión social que planteamos. Esa conducción tiene que estar en manos de los trabajadores en actividad y de los jubilados, es la única garantía de que no siga siendo la caja a la que quieren manejar distintos partidos políticos. Esta lucha se va a ganar acá afuera, en la calle”, finalizó la diputada aplaudida por todos y todas.
Presencias
Entre los presentes y los adherentes se encontraban José Luis Matassa, secretario general de ATE Capital Federal, Alejandro Garzón, secretario gremial de ATE Nacional, Vilma Ripoll, Elia Espen (de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora), integrantes de ATE Indec, los trabajadores portuarios del movimiento Estibadores de Pie, Mario Barrios de la Unión Solidaria de Trabajadores (UST), integrantes de la Junta Interna del Hospital Francés y representantes de la CTA Capital y Nacional.
La diputada Liliana Parada también se dirigió a los jubilados: “Les quiero decir que estar acá me llena de emoción. El 82% móvil es la dignidad del trabajador, no es una limosna es lo que les pertenece por derecho no por privilegio, es lo que se merecen después de dar su vida al aparato de producción, dieron todo para que la república sea lo que es”. Antes de volver a las sesiones, Parada concluyó: “Lo que espero, lo que ansío es que este proyecto de ley sea una realidad lo antes posible. El veto de la presidenta ha sido vergonzoso. Nosotros tenemos la respuesta, decimos cómo se puede financiar. Esperamos que más tarde que temprano esto sea una realidad”.
Entre los oradores en esta tarde histórica también estuvo Eugenio Semino, defensor de los derechos de la Tercera Edad de la Ciudad de Buenos Aires y de Iberoamérica: “Estaba pensando en un número, 1050 fueron las marchas y miles los compañeros que quedaron en ese tránsito pidiendo justicia. En todo ese tiempo cuando algunos otros hacían plata con la circular 1050, son los mismos que hoy pueden decir que un jubilado puede estar contento con 1600 pesos, que hablan de porcentajes pero no de la comida que se puede comprar”.
Semino agregó además que hace 10 años había un 17% de jubilados que cobraba la mínima, mientras que en la actualidad es el 80% de los jubilados los que perciben el haber mínimo. “Cuéntenme entonces qué redistribución hubo de la riqueza, acá lo que hubo fue una redistribución del ingreso y así emparejamos para abajo. Hoy todos los jubilados están sobre los índices de pobreza de Guillermo Moreno, todos los jubilados le prestan plata a Techint con sus fondos. Todos los jubilados pueden esperar la muerte haciendo juicios que durarán varias vidas. Por eso la lucha es lo único que va a garantizar recuperar estos derechos. Necesitamos que la justicia se haga hoy, que todos los trabajadores se vean en el futuro como jubilados para que no exista el trabajo en negro, la prebenda y el subsidio sino el trabajo digno. No es un problema la vejez, el problema que tenemos que afrontar es la pobreza”, concluyó el ombusdman porteño.
Luego de la clara exposición de Semino, la jubilada Cora Monti entregó a los diputados presentes las 160 mil firmas a favor del proyecto legislativo. Y con la voz de Elías Moure: “Con la fuerza de los que no se resignan sigamos para adelante”, los legisladores volvieron al Congreso para seguir haciendo leyes a favor del pueblo.
“En realidad nuestro homenaje a estos compañeros de los que hemos tomado el ejemplo. Los más ancianos van muriendo en el camino con esa miseria de 1600 pesos. Somos parte de esta organización y de esta lucha, la clase trabajadora tiene que terminar con esas divisiones de los viejos jubilados y de los jóvenes activos”, dijo Ana Gorría, integrante del Movimiento Estibadores de Pie.
Uno de los últimos oradores fue Julio Masera, secretario general adjunto de la CTA Capital: “De ustedes aprendimos que nuestros sueños nunca van a ir a parar al altar del posibilismo, vamos a seguir luchando para hacerlos realidad. Ojalá algún día podamos cambiarle el nombre a ese cruce de calles y llamarlo -en homenaje a ustedes- Dignidad y Lucha porque eso es lo que ustedes nos han enseñado”.
Acompañado por un seminarista, Luis Sánchez, cura compañero de Angelleli y Carlos Mugica, dio un discurso que quedará en la memoria de todos los presentes: “Hoy como siempre estamos en la lucha popular porque ahí está Dios, un Dios liberador que no aplasta ni oprime. Yo vine hoy gracias a que me trajeron los compañeros de la Unión Solidaria de Trabajadores con Mario Barrios a la cabeza. Como decía Angelleli debemos tener un oído en el Evangelio y otro en el pueblo. No somos violentos, rechazamos la violencia pero para eso tenemos que luchar contra las causas de la violencia”.
Ante la escucha atenta de los compañeros y compañeras, el padre Luis, como se lo conoce familiarmente, agregó: “Yo milité mucho tiempo y no estoy arrepentido en el Movimiento de Sacerdotes para el Tercer Mundo y ahí luchábamos por un Socialismo original y latinoamericano. Ahí estuve con el compañero Carlitos Mugica que el 11 de mayo se cumplió un nuevo aniversario de su muerte. Con él renovamos el compromiso de no quedarnos quietos hasta que venga un mundo nuevo pero para eso tenemos que ser nosotros hombres nuevos”.
Sánchez recordó también a Raimundo Ongaro de la CGT de los Argentinos, con quien también trabajó y volvió a parafrasear a Angelleli: “hay que seguir andando nomás, hay que seguir andando. Pero no de rodillas sino de pie y luchando por un mundo para que nadie se tenga que arrodillar delante de nadie, que nadie le tenga que decir amén a los poderosos de la tierra. Sigamos diciendo sí a la vida y no a la muerte”.
Antes de finalizar, el Padre Luis, compartió una cita de la Misa Campesina nicaragüense del Movimiento Sandinista de Liberación Nacional: “Tú eres el Dios de los pobres, el Dios humilde y sencillo, el Dios que lucha en las calles, el Dios del rostro curtido’. Como siempre les digo: a Dios rogando y con el mazo dando y pensando que vamos a seguir luchando que no vamos a bajar los brazos, la única lucha que se pierde es la que se abandona. Vamos a seguir luchando por salir de este modelo capitalista de la explotación del hombre por el hombre. Entonces digo nada más esto que dijo un día Ernesto: seguimos luchando hasta la victoria siempre!”.
Y con el sonido de sus consecuentes palabras, invitados por Lidia Meza (secretaria de Previsión Social de la CTA), los compañeros y compañeras marcharon abrazados alrededor del Congreso. Fue la marcha 1050 de la dignidad y la resistencia.